Antes de referirnos al tema del estrés laboral revisemos la definición de la palabra estrés.
¿Qué es el estrés?
El estrés es una sensación de tensión física y emocional que se desencadena a partir de una situación o circunstancia que genera en la persona, preocupación, frustración y otros sentimientos negativos. El estrés cuando no se controla puede generar enfermedades físicas graves en el cuerpo como resultado de un trastorno psicosomático.
Otra definición:
«Es una reacción fisiológica del organismo en el que entran en juego diversos mecanismos de defensa para afrontar una situación que se percibe como amenazante o de demanda incrementada» Wikipedia
¿Cuántos tipos de estrés existen?
Existen diversos tipos de estrés, les mencionamos los más conocidos:
- Estrés normal
Es el tipo de estrés más común que se produce ante determinadas circunstancias e incluso puede ser positivo en la justa medida para afrontar ciertas actividades.
- Estrés patológico
Este es un estrés más severo causado por trastornos psicosomáticos que generan problemas físicos y psicológicos por un largo periodo de tiempo. Este estrés se puede volver crónico y provocar además de las dolencias físicas cuadros de ansiedad, tristeza y depresión.
- Estrés post-traumático
Este es el tipo de estrés que surge a partir de una experiencia que ha provocado algún trauma en la persona. Dicha experiencia traumática puede haber sido un terrible accidente, un desastre natural, la pérdida de un familiar, una violación, etc.
- Estrés laboral
El estrés laboral es aquel que se produce debido a la excesiva tensión en el ámbito laboral que se refleja en un conjunto de reacciones fisiológicas y emocionales en el trabajador. Se produce a partir de diversas causas siendo la carga de trabajo la más frecuente. Si el estrés laboral se vuelve crónico se genera lo que se conoce como síndrome de “burnout” o de desgaste profesional.
¿Qué es el estrés laboral?
Aunque ya mencionamos el concepto en la sección anterior recuramos ahora a la definición de la OMS (Organización Mundial de la Salud) respecto del estrés laboral:
“El estrés laboral es identificado como un grupo de reacciones emocionales, psicológicas, cognitivas y conductuales ante exigencias profesionales que sobrepasan los conocimientos y habilidades del trabajador para desempeñarse de forma óptima “
Causas y consecuencias de estrés laboral
En esta parte veremos cuáles son las causas más comunes del estrés laboral y sus consecuencias.
Causas
- Carga laboral: horas excesivas de trabajo, muchas actividades que desempeñar, poco descanso.
- Funciones adicionales asignadas para las cuales no se está preparado.
- Malas condiciones laborales.
- Problemas con los jefes o la gerencia.
- Problemas con compañeros de trabajo.
- Incertidumbre respecto de la estabilidad del puesto.
- Sensación de ser poco valorado.
Consecuencias
El estrés laboral puede volverse crónico y grave y afectar no solo la vida personal sino profesional, por ello es importante repasar cuales pueden ser las consecuencias de no prevenirlo:
- Enfermedades físicas y otras patologías.
- Irritabilidad y apatía.
- Problemas emocionales.
- Trastornos psicológicos.
- Absentismo.
- Baja productividad.
- Disminución de la calidad del servicio.
Prevención del estrés en la empresa
En los tiempos actuales, uno de los principales problemas al que tienen que hacer frente las empresas es el estrés laboral. Este fenómeno puede producirse por diferentes razones, aunque generalmente se debe a situaciones en las que el trabajador siente que pierde el control ante una demanda de trabajo muy fuerte.
Además el estrés se trata de una las causas más comunes de baja laboral suponiendo un coste muy alto para las empresas. El mejor modo de evitar este inconveniente es a través de la prevención y para ello hay que empezar por reconocer los síntomas en el trabajador tales como la apatía, la depresión, la irritación, la ansiedad o la falta de concentración.
Una vez que han sido detectadas las señales de estrés hay que pasar a la acción por medio de la organización. La planificación del trabajo diario es vital en este caso, incluyendo los tiempos de descanso, ya que sirve para recuperar el control que se creía perdido.
Por lo tanto es muy importante saber priorizar y dividir los proyectos de gran tamaño en pasos o tareas más pequeñas. Para ponerlo en práctica e implementarlo en una organización un curso de prevención del estrés suele ser de gran ayuda puesto que no nos han preparado ni académica ni prácticamente para este tipo de situaciones.
A la hora de prevenir el estrés los jefes de departamento tienen un papel clave ya que deben ser un ejemplo para su equipo sabiendo delegar en los momentos adecuados, mejorando la comunicación, consultando a los empleados y creando un buen ambiente de trabajo.
¿Cómo reconocer el estrés en el trabajo?
El estrés es uno de los problemas de salud más comunes hoy en día ya que el ritmo de vida actual, en el que hay que conseguir muchos logros en poco tiempo, puede terminar afectando negativamente a las personas y, en consecuencia, a su productividad.
Los síntomas del estrés pueden manifestarse de varias maneras como la falta de sueño, la irritabilidad, los dolores de cabeza o la tensión muscular, entre otros. Debido a ello se recomienda que en las empresas circulen información sobre este problema y las técnicas de prevención del estrés.
Cada persona es diferente y por lo tanto también lo son las causas de su estrés. Lo mejor es comenzar por analizar aquello que nos altera, ya sean personas, lugares o actividades, a través de una lista.
Así se pasa al uso de técnicas de relajación para afrontar estos inconvenientes tanto a nivel laboral como personal. Lo más común es recurrir a ejercicios de respiración y a los estiramientos físicos a lo largo del día, haciendo pausas durante la jornada de trabajo con el fin de desconectar.
Por otro lado, el ejercicio físico al igual que una dieta equilibrada son muy útiles en la liberación de tensiones. Siguiendo estos simples consejos se pueden conseguir resultados muy positivos en la prevención del estrés.
¿Cómo prevenir el estrés en el trabajo?
La palabra estrés tiene su origen en el término inglés “stress” que significa tensión. La tensión algunas veces nos permite hacer frente a ciertos problemas y retos pero también puede tener efectos perjudiciales para la salud.
Cuando un individuo o un grupo están sometidos a una presión inapropiada el resultado tiende a ser negativo en lugar de funcionar bien. Los cursos de prevención de estrés permiten identificar los síntomas del estrés y reaccionar antes de que vaya a más.
En el mundo empresarial existe la falsa creencia de que unos empleados relajados son menos productivos y en realidad puede ser al contrario. El estrés provoca que los trabajadores estén desconcentrados, cometan más errores y gestionen mal su tiempo.
La base de un buen curso de prevención de estrés es conseguir que cada individuo tenga el control de su propia vida. Para ello cada persona tiene que tomar conciencia de su cuerpo, su entorno y sus necesidades.
Un curso de prevención de estrés suele estar dividido en una parte centrada en los efectos psicológicos y otra en los efectos físicos.
En la primera parte se estudia qué es realmente el estrés, se analiza el problema y cómo afrontarlo en diferentes situaciones, y se aprende a reconocer los síntomas en uno mismo y en otras personas.
Un buen método de aprendizaje es por medio de las dinámicas de grupo en las que los participantes asumen diferentes roles.
En la parte física las técnicas corporales tienen un papel importante. Controlar la respiración, el cuerpo, el ritmo, el equilibrio y la alimentación será su finalidad.
Como ya se ha mencionado, el entorno también influye en el estrés laboral y trabajar en unas instalaciones adecuadas puede prevenir situaciones de riesgo.
Técnicas de Control del Estrés Laboral
El estrés en el espacio laboral es uno de las principales causas de enfermedad, desmotivación y bajo rendimiento en el entorno laboral. Es un problema invisible y silencioso, de difícil diagnóstico por parte de los directivos y que supone un costo enorme.
Sin aparecer en la cuenta de resultados, el nivel de estrés, socava enormemente las posibilidades de un proyecto empresarial. Los prejuicios respecto a esta realidad van reduciéndose y sin embargo, en momentos de contextos económicos adversos, se multiplican los casos y muy pocos mandos son capaces de plantear una estrategia adecuada por y para sus empleados.
Las empresas con mejores perspectivas son aquellas que depositan en sus empleados no solo la responsabilidad de sus funciones sino la formación en Curso de Prevención del Estrés para desarrollar herramientas internas con que gestionar adecuadamente la presión para sacar lo mejor de uno mismo dentro de una coherencia como seres humanos.
Dentro de esta formación, destacan técnicas específicas para el control del estrés que pueden ser:
- Desarrollo de un buen estado físico.
- Una alimentación y nutrición equilibrada que fortalezca, desarrolle y no tense inconscientemente el cuerpo.
- Estructuración práctica de la mente para el reconocimiento de la presión y las herramientas cognitivas adecuadas.
- Relajación física y control de la respiración.
- Técnicas de creatividad y búsqueda de soluciones.
- Localización de focos de tensión mental y desensibilización paulatina.
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