Los medios audiovisuales útiles para una presentación en público
Marshal McLuhan en los años sesenta afirmo: el medio es el mensaje
¿Cuál es tu opinión al respecto?
¿Qué opinión tienes de la utilización de los medios audiovisuales actuales?
Reflexionemos durante un minuto.
- En cuantas ocasiones nos hemos encontrado frente a una comunicación donde el presentador utiliza uno o dos minutos de presentación, otro par para la despedida y entre medias la nos muestra un tema durante 55 minutos con unas cien diapositivas que va leyendo.
¿es esta una presentación eficaz?
¿son los medios audiovisuales una ayuda o una barrera?
- Los medios audiovisuales deben ser un “apoyo”, es decir, nos deben ayudar a transmitir conceptos, ideas, argumentos de forma más fácil y eficaz, pero en ningún caso deben “sustituir nuestra labor”
- El material audiovisual debe cubrir los siguientes aspectos:
- Ser adecuado para el tema a tratar y para el entorno.
- Apoyar nuestro mensaje.
- Crear interés en nuestro público.
- Utilizarse de forma moderada.
- Por lo tanto necesitamos
- Establecer que material voy a utilizar y cómo lo voy a hacer. No podré utilizar un papelógrafo para un público de cien personas, básicamente porque no lo van a ver.
- Diseñaré el material en base a los principios establecidos anteriormente
- Utilizaré conocimiento y creatividad para atraer el interés. Deberemos tener en cuenta los gráficos, ilustraciones, y cuadros expresados con viveza son los que valen más que mil palabras. Nos debemos preguntar ¿Qué puede despertar el interés en el auditorio?
- Realizaremos las diapositivas:
- Con esquema general.
- Con una idea por transparencia.
- Utilizando “síntesis en las frases”. No se trata de trata de escribir grandes párrafos si no la idea. Es nuestra función comentarla, no leer.
- Debemos preparar el material audiovisual con suficiente antelación.
- Tener claro que no sustituyen en ningún momento a la presentación.
- Que son APOYO a nuestro mensaje.
- Que deben ser adecuados al tema, tiempo, mensaje y número de asistentes.
- En un curso en presentaciones profesionales aconsejan que nunca comencemos una presentación leyendo un texto escrito.
- No aprender de memoria todo lo que vamos a decir (sólo primeros minutos son admitidos).
- No comenzar directamente con una diapositiva o película sin antes mostrarnos nosotros